La primera planta de Euskadi para el reciclaje de aceite de barcos es ya una realidad y ha entrado en funcionamiento en el puerto, a la altura de Zierbena. Desde allí dará servicio a 1.500 buques al año, realizando la recogida y tratamiento de los residuos industriales procedentes de las naves, y transformándolos en combustible útil para la producción de energía eléctrica.
La construcción de esta planta, denominada Linersa, ha sido promovida por la firma catalana Tradebe. Tras realizar una inversión de 1,6 millones de euros, la factoría cuenta con cinco tanques de 96 metros cúbicos para almacenar aguas industriales y 'Marpol' -combustibles y productos oleosos-, así como otros tres depósitos de 27 metros cúbicos para emulsiones varias.
La consejera de Medio Ambiente, Esther Larrañaga, presidió ayer la inauguración de las instalaciones e insistió en la necesidad de «atender a los residuos del mar si queremos tener un mundo sostenible». Una labor en la que este tipo de plantas juega un papel fundamental, ya que se estima que el 20% de la polución marítima procede del vertido clandestino de estos residuos a las aguas.
Linersa dará empleo a una treintena de trabajadores distribuidos en sus dos actividades: el tratamiento de residuos oleosos para obtener combustibles, y el centro de transferencia de los mismos. La planta de Zierbena, cercana a las instalaciones de Bahía de Bizkaia en el término municipal de Santurtzi, ocupa 6.700 metros cuadrados.