ANAM se constituyó en el año 1992, a iniciativa de la Dirección General de la Marina Mercante, con el objetivo de agrupar, a nivel nacional, las empresas prestadoras del servicio de recogida y gestión de los residuos procedentes de los buques (conocidos como residuos MARPOL ) y organizar la cobertura del mismo, en todos los puertos de interés general.
La denominación de estos residuos procede del Convenio MARPOL 73/78 (abreviatura de Marine Pollution), conjunto de normas internacionales cuya finalidad es prevenir la contaminación marina por los buques, por causas operativas o accidentales. Combina dos Tratados, adoptados en 1973 y 1978, respectivamente.
Este Convenio obliga a las Partes que lo ratifican a disponer de instalaciones de recepción en sus puertos, de tal manera que los buques entreguen en tales instalaciones los residuos, cuya descarga en la mar está prohibida. La finalidad de dicha entrega es evitar la contaminación marina y dar a esos residuos el tratamiento adecuado en tierra, anulando su poder contaminante y, cuando sea posible, proceder a su reciclado para su posterior reutilización.
Los residuos que genera la actividad de un barco son muy variados y se regulan mediante diferentes Anexos del Convenio:
Contribuimos a la prevención de la contaminación marina, ofreciendo un servicio portuario básico, de uso obligatorio, que fomenta la entrega controlada de los residuos de los buques y su posterior gestión medioambiental.
Desde su constitución, ANAM mantiene una estrecha colaboración con Puertos del Estado y la Dirección General de la Marina Mercante siendo, para ambos organismos, el interlocutor reconocido en la prestación del servicio MARPOL. Colaboramos, igualmente, con las diferentes Autoridades Portuarias y Capitanías Marítimas, a través de nuestras empresas asociadas.
En consecuencia, podemos considerarnos el máximo representante, a nivel nacional, de este sector empresarial.